Viene a enseñarnos cómo hacer para que el agua se convierta en liquido de freno y que los problemas económicos de todos se resuelvan. Así de iluminado y de buena onda viene entre nosotros.
Parecería que he perdido el norte, o que busco que algún fundamentalista me queme en la hoguera, pero antes que busquen mi hogar para darme una paliza. Déjenme decirles que este personaje resultó ser no más que un ídolo de oro, como el de Moisés. (Éxodo 32:1-35)
Un viejo, viejo, viejo tema
Este es un tema viejo, que ya antes lo he tratado. Pero que es tan común y sale tanto a la vista que puede ser repetido por todos. Se trata del más grande ilumínati de la historia, un fulanito que sabe “todo” (según él/ella). Es una persona común y sin muchos atributos. Que en su escaso o nulo conocimiento intenta iluminar nuestros caminos por el sendero de su “gran sabiduría”. Es una de estas personas que uno sabe, que no sabe, pero aun así se le ve hablando como erudito de un tema. Ilustra, informa y hasta da ejemplos, de los más fumados posibles. Y hay de aquella pobre alma mortal que lo contradiga, que se la hará de enemigo.
Pueden ser amigos, compañeros, subordinados, jefes, jefes de jefes, maestros, catedráticos, políticos… etc. Cualquiera puede llegar a creerse el papá de los pollitos y comenzar a predicar sus enseñanzas.
Como identificarlos (como si no fuera ya tan obvio)
Es muy fácil. Las frases que utilizan pueden ser muchas. Pero hay algunos otros que bien se esconden tras una máscara de conocimiento.
Va, quienes escucharon las frases.
- "sabes yo lo hago de esta manera y siempre me sale bien…”
- “yo en tu caso haría esto…”
- “no le hagas caso, lo que debes hacer es esto…”
- “yo llevo X tiempo acá y se como se hace todo”
- “¿y vos/Ud. cree(s) que puedes enseñarme? Si yo ya lo sé”
Muchos quieren enseñar las cosas obvias de la vida, economía, computadoras, física, química, vudú, alquimia, exorcismo, comida rápida… etc. Y lo dicen con tanta seriedad que no se les puede negar, pues pareciera que son reales.
Unos han estudiado y tienen títulos universitarios o de otros lados. Y por ello damos por hecho, casi de facto que lo saben todo. Así que si lo dicen, debe ser cierto. Muchas veces cuando se les idolatra con que saben, ellos mismos terminan creyéndoselo y caen en el pecado del sobre conocimiento mágico.
Pero si uno sabe del tema o investiga por otros lados, puede darse cuenta que, esta persona esté
Historias
En jefes, abundan los temas. Un ejemplo de estos se llegó con un conocido que le llamaré Juan, que ha trabajado por mucho tiempo en producción. Se graduó y llevó cursos del mismo tema. Y es casi como “Don” para lo mismo. Llegó ilusionado a un trabajo, en una empresa que aunque no le iba a pagar mucho, tenia renombre dentro de la sociedad. Y de todas maneras, trabajo es trabajo.
Entró, se presentó y todo así bonito. Le dieron hasta una plantita para su oficina y todo lo que dice la ley. Pero, se topo con que su Jefe, era el hijito, del cuñado, del abuelo… del dueño de la empresa. Y que por puro cuello le dieron trabajo. El hijo de su madre, no sabe casi nada del proceso. Saco una carrera en control de personal, pero lo dejaron en el área de desarrollo. Así que comenzó la pesadilla. -Es rojo en el empaque, debe ser rojo en el producto-. -No se debe colocar esto, porque “a mí no me gusta”-. O el clásico, -“¿por qué debemos poner esto, si hay algo más barato?”-. Pero este no es de este tema, el susodicho jefe conocía, según él, como era todo el proceso y
Lo mismo pasó con un amigo, Luis. Este amigo trabaja en una empresa de arquitectura, un estudiante que salió con honores, premios y reconocimientos en todos lados. Pero por falta de trabajo, se vio a obligado a aceptar un trabajo en un sitio, que si bien no era la más grande maravilla, era un buen sitio para comenzar a tomar carrera.
Sin embargo, había un compañero suyo. Un señor de sus N^2 años, que llevaba en el negocio tanto como político en el gobierno. Ante cada cosa que mi amigo hacía había un “método mejor”. Mi amigo, como muchos de sus compañeros, hizo lo que más comúnmente se hace: Ignorarlo. Pero, como siempre es molesto tener a alguien viendo por encima de los hombros, para ver si está usando su “método” o el que él sabía que era más eficiente. Este amigo terminó encontrando un mejor trabajo y se salvó de esta situación, pero es uno de los pocos afortunados.
Existen de este tipo de personas en todos lados, incluso ante los temas más personales se meten. Si muchos buscan compañía y un buen amigo, cuando se necesita de apoyo. Hay uno de estos, que sabe “muy bien” lo que se debe hacer, porque esto le pasó a un amigo suyo. Y sus consejos son tan incoherentes que uno se limita a decirles, gracias por tu apoyo. Y fin.
Un amigo hace mucho, se hizo novio de una chava, y luego debía
¿Pero qué se puede hacer? ¿Un exorcismo?
Escuche de muchos, un montón de consejos. El más simple es siempre ignorarlos, pero depende de cómo sea el tipo este.
Si se le ignora, puede que se sienta ofendido y ya no hable. Lo que sería tan grandioso que hasta velitas pondríamos a un santo. O esperando que con el tiempo hable más y más, hasta que se
Se puede poner en su contra, y enseñarle, sí es tranquilo puede que se mejore, y uno quedaría como un santo y aprenda con nosotros (*Bandura). Pero si no, el infierno sobre la tierra. Si no se le salta a uno con las uñas, lo comienzan a uno a tratar como pedante o sabelotodo. Si, ahora dis que somos nosotros. Solo recuerden que siempre deben respetar sus ideas, el chiste es que reaccionen o no hacerlos de enemigos.
Muchos me dijeron que simplemente los ignoraron, o que les dijeron “Lo haré a mi modo gracias” claro, esto puede ser una espada de doble filo. Pues si a uno le sale bien, buena onda. Si no, uno quedará como bobo y tendrá que pedirle ayuda. Lo mejor sería, según alguien me dijo, y creo que es lo mejor. Escucharlo todo, por loco que suene (o tonto) y analizar muy bien si tiene sentido o no, y luego, dale una crítica constructiva de respuesta. (Carnegia, 1996) Trate honradamente de ver las cosas desde el punto de vista de la otra persona.
Solo lo único, es que si este aparece en el peor momento: Cuando se está desvelado, no se ha comido, el novio(a) lo mandó al demonio y el perro mordió el usb con el proyecto, que debía entregar. Esos son los momentos cuando estos aparecen como zancudos en hospital… aquí aunque cueste un ojo hay que tener paciencia y mandarlo a su… casita, diplomáticamente.
Si usted es uno de estos dioses sobre la tierra, en otro blog diré como influir sin llegar a ser odiado, pero por el momento… tranquilo, no siga enseñando.
Si tienen historias parecidas o tienen consejos, ayuda. MUCHOS quieren escucharlas.
Bibliografía
Bandura Albert Teoria de la personalidad [Libro] = Terapia de Modelado. - pág. 6.
Carnegia Dale Como ganar amigos e influir sobre las personas [Libro] = Logre que los demás piensen como usted. - 1996. - págs. 58-92.
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